Hubiera aprendido a dejar de buscar oraciones
con un sujeto claro para encontrarlo omitido en el "yo te..."
A dejar la polinización para las abejas.
Y las cañas para el mar.
Hubiera aprendido a tocarte
con los ojos cerrados,
los sentidos mudos
y perdidos de magia por todos lados.
Hubiera aprendido a interpretar silencios,
a escucharte en todos los formatos
y sin asustarme.
Hubiera aprendido a ver, que las mejores historias
no son las que más tiempo llevan,
sino las que construyen un principio nuevo cada día.
Para así, seguir creciendo.
Y de imperfectos a vivirte en presente.
A dejar de lado nuestras posibles conjugaciones.
A vivirte, con ganas y mucho miedo.
"... y estás como distante. Y estás como quejándote..."
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